Los clásicos entre Alianza y Newbery serán especiales. Rivalidad, color, pasión y –como si fuera poco- un Bianco de cada lado.
Los de la capital rionegrina y los de Carmen de Patagones se volverán a enfrentar a partir de mañana, en los cuartos de final de la Liga B.
Los últimos meses han sido especiales para ambos porque, después de algunos cruces ocasionales en las categorías formativas, la presente temporada de la Liga B los puso frente a frente por primera vez.
Casi les permite jugar juntos, “hubiera sido lindo” dijeron ambos, cuando Newbery buscó la contratación de alero, pero al cerrar con Alianza se convirtieron en rivales.
Mauro y Lucas Bianco fueron de la partida en los tres clásicos anteriores y a partir de mañana buscarán llegar a las semifinales del torneo. Uno se llevará “la gloria familiar” el otro quedará masticando bronca.
Mauro y Lucas Bianco fueron de la partida en los tres clásicos anteriores y a partir de mañana buscarán llegar a las semifinales del torneo. Uno se llevará “la gloria familiar” el otro quedará masticando bronca.
Los dos esperan que esta serie de partidos, con el deseo de que sean a canchas llenas y reavive el entusiasmo por el torneo local.La rivalidad sólo estará en la cancha y los que más sufrirán serán papá Víctor, mamá Marta y la hermana Anabela, quienes seguirán las acciones desde Bahía Blanca.
Con Juan Ignacio como testigo, que repartió su tiempo entre los brazos de papá Mauro y los del tío Lucas, la charla con VOLCADAS recorrió sus inicios y, en especial, el presente.
Para ambos el objetivo está muy claro. Lucas, alero de Alianza Viedma, rompió el fuego y señaló que “queremos pasar. Pasar el play offs haciendo buenos partidos”.
Mauro, ala pivote de Newbery, indicó que “nosotros venimos mejor posicionados por la buena campaña que hicimos hasta el momento, pero sabemos que es un play offs muy importante, que va a definir: Hacer una buena temporada o una excelente temporada” y agregó que “tenemos un poco más de presión por ser los primeros de la B1, que no es algo así nomás. Será una serie difícil y si ganamos mejoraremos un montón de cara a lo que viene”.
-¿Cuánto influye que un equipo llega después de varios días de inactividad y el otro tras ganar muy bien en la Reclasificación?.
Mauro: “Esto para nosotros es una buena medida porque ellos vienen encontrando un poco el juego en equipo que no tuvieron en el resto de la temporada, sólo en pocos partidos o en pocos momentos, y haber jugado tan bien en Rosario y haber conseguido un triunfo en esa cancha va a ser una buena medida porque nosotros venimos de un parate largo, sin hacer amistosos, pero sirvió para recuperar a Ale (Alejandro Foró). Espero que no, pero nos puede costar acomodarnos en el primero, pero confiamos en el equipo y nos conocemos bastante como para salir rápido de una situación así, si es que se presenta”.
Lucas: Para nosotros fue muy importante lo que pasó, tanto en lo anímico que se ve reflejado mucho, como también en el juego. Hicimos tres buenos juegos contra Central. Fuimos contundentes de local; el segundo fue muy bueno, dominamos durante 39 minutos y tuvimos un pésimo cierre porque hicimos dos o tres cosas mal y se nos vinieron; y en el último fuimos contundentes y teniendo un buen colchón de puntos se nos vinieron. Creo que pesó la localía, más en los árbitros, pero cuando jugás de visitante sabés que los árbitros son localistas. Ahora estamos bien y encontrando un buen nivel de juego”.
¿Coincidís con Mauro sobre el nivel que mostraron en buena parte de la liga?.
L: Sí, tuvimos ráfagas, dentro de un partido teníamos dos o tres caras, en todos los partidos tuvimos bajones, ahora estamos mejor y tal vez nos falte un poco más de regularidad en los cierres. Pero estamos bien”.
Cuando se enteraron que serían rivales en semifinales, ¿cómo lo tomaron?.
M: “Cuando nos enteramos las más aliviadas fueron nuestras mujeres que no se quedaban solas. Los dos somos muy competitivos, queremos ganar y llevar a nuestros equipos lo más arriba posible. Más allá de eso no hay nada, nunca competimos entre nosotros para ver quien era mejor o peor. Nunca nos enfrentamos, ni siquiera en la misma categoría. Una vez que entramos a la cancha ya sabemos que tenemos que hacer, inclusive tenemos amistades comunes entre nuestros compañeros y todo eso se deja de lado. Termina el partido y tal vez nos vayamos a comer juntos o a tomar mate, como hasta antes de venir a hacer la nota. Lo especial es el folklore que se vive en la Comarca, los mensajes, las gastadas”.
L: “El que más difícil lo vive es mi papá. Cuando me llamó a Rosario para felicitarme lo noté bajoneado porque en una semana uno de los dos se iba a quedar afuera. El es muy seguidor de los dos, son cosas que pasan, somos profesionales y entendemos que esto es así. Lo mismo sería si no nos hubiéramos cruzado”.
M: “Además estamos jugando por ir arriba, diferente sería jugar por un descenso, estamos jugando la parte más linda del torneo, cualquiera que siga, el otro va a quedar con un poco de desazón pero atrás va a quedar una buena campaña de los dos lados”.
¿Ya empezaron a jugar los partidos?.
L: “No, no somos de hablar mucho. Sí preguntar si entrenan, pero los dos somos muy reservados en cuanto a lo táctico”.
¿Cuáles serán las claves para estos partidos?.
¿Cuáles serán las claves para estos partidos?.
M: “Los partidos anteriores fueron hace casi cuatro meses, ellos cambiaron de entrenador y de jugadores, no sirven como antecedentes. Creo que son un equipo un poco más corto que el nuestro y apostar a un desgaste para llegar mejor al final del partido, sería un buen punto. En lo individual nos conocemos mucho y sabemos que hace cada uno. La rotación y el desgaste tal vez sea una de las claves”.
L: “No hemos hablado mucho de Jorge, pero nos conocemos a pesar de los cambios de entrenador y algunos jugadores. Nuestra clave es tratar de hacer los juegos que vinimos haciendo y no enloquecernos. En estos clásicos a veces el contexto te juega una mala pasada. Con Central también era contra un equipo más largo, tal vez no con tan buen juego colectivo y lo pudimos pasar”.
M: Esperamos que sea lo más corta posible, está todo en los papeles porque hace rato que no jugamos, mucho no va influir si son dos o tres partidos. Si fueran tres, por el desgaste, tal vez nos favorezca, pero si es en dos mucho mejor”.
En este caso la localia influirá muy poco…
M: “Sí, más que nada es el viaje y el trajín lo que te cansa. Creo que las dos canchas van a estar llenas, la gente va a estar muy comprometida con el espectáculo que demos. La diferencia es que terminás y te vas a tu casa, dormis en tu cama”.
¿Los viajes influyen más en lo físico o en la cabeza?.
M: “Para mi en lo físico, la mayor parte, un setenta por ciento. Tenés el viaje, tenés que levantarte, desayunar, entrenar, comer, dormir la siesta y jugar, y a nosotros los viajes largos nos han costado”.
L: “Acá estás en tu ambiente, en tu casa, con tu familia, manejás tus horarios. En esta serie se pierde el lugar del visitante, más allá de la cancha. La gente de la Alianza y Jorge va a estar en igual medida. Afuera sos bien visitante”.
Por eso los dos apuestan por ser locales. Más allá de lo deportivo, porque Mauro se ilusiona con un Jorge Newbery que siga jugando este tipo de torneos para “poder seguir acá”, mientras que Lucas, con una temporada más de contrato con Alianza Viedma, ya analiza con su familia una radicación definitiva.Para ambos permanecer en la Comarca sería una buena oportunidad porque se sienten respetados. Como jugadores, con todos los compromisos cumplidos por ambos clubes; y –en especial- como personas en un ambiente que los trata como propios.
Mauro Bianco nació el 25 de febrero de 1978 en Punta Alta, está casado con Carina y son padres de Agostina de cuatro años y de Juan Ignacio de un año y medio.Se inició con su hermano en el club Espora y luego se mudó a Pellegrini, ambos de su ciudad natal. A los 18 años participó en un campus en El Nacional y fue incorporado por la institución bahiense, donde estuvo hasta 2004.Su campaña continuó en Costa Sud de Tres Arroyos, fue rival de Sol de Mayo y Atenas en la temporada 2005/06 de la Liga B; pasó a Oberá Tennis Club de Misiones, donde compartió equipo con Mauricio Beltramella y recaló en Jorge Newbery a mediados de 2008 para permanecer hasta el momento. Fue campeón en los torneos Oficial de 2008 y 2009.
Mauro Bianco nació el 25 de febrero de 1978 en Punta Alta, está casado con Carina y son padres de Agostina de cuatro años y de Juan Ignacio de un año y medio.Se inició con su hermano en el club Espora y luego se mudó a Pellegrini, ambos de su ciudad natal. A los 18 años participó en un campus en El Nacional y fue incorporado por la institución bahiense, donde estuvo hasta 2004.Su campaña continuó en Costa Sud de Tres Arroyos, fue rival de Sol de Mayo y Atenas en la temporada 2005/06 de la Liga B; pasó a Oberá Tennis Club de Misiones, donde compartió equipo con Mauricio Beltramella y recaló en Jorge Newbery a mediados de 2008 para permanecer hasta el momento. Fue campeón en los torneos Oficial de 2008 y 2009.Define a su hermano como un “alero completo, tiene buen gol desde el perímetro, es rápido y defiende bien. Una característica sobresaliente que tiene es que no necesita la pelota para ser un jugador importante”.Según Mauro, “Lucas es una excelente persona, siempre nos llevamos bien y cuando estuvimos lejos siempre mantuvimos el contacto. Nos encontrábamos en Misiones o en Charata y nos íbamos a ver en partidos de otras categorías. Es un tipo bárbaro y como hermano es muy bueno”.
Lucas Bianco también nació en Punta Alta, el 20 de septiembre de 1980, se unió a Dolores y, “por ahora”, son padres de Santino de un año y tres meses.Tras sus primeros pasos en Espora pasó a Altense y fue ocasional rival de su hermano en las divisiones formativas. Mauro lo llevó al campus de El Nacional y durante varios años pudieron compartir equipo en el Torneo Nacional de Ascenso, los torneos de la Asociación Bahiense y en varios provinciales. Luego pasó por Independiente de Neuquén, Argentino de Junín y Asociación Italiana, en el TNA; y Estudiantes en la Liga Nacional 2008/´09.En la Comarca jugó en Sol de Mayo (2005 y 2008) y en San Martín (2007). En la última campaña de los “albicelestes” fue parte de un desembarco masivo de jugadores provenientes de Italiana de Charata: Con él jugó Sebastián Rodríguez y en Atenas ficharon Hernán Etchepare y Nicolás Bessone.
Lucas Bianco también nació en Punta Alta, el 20 de septiembre de 1980, se unió a Dolores y, “por ahora”, son padres de Santino de un año y tres meses.Tras sus primeros pasos en Espora pasó a Altense y fue ocasional rival de su hermano en las divisiones formativas. Mauro lo llevó al campus de El Nacional y durante varios años pudieron compartir equipo en el Torneo Nacional de Ascenso, los torneos de la Asociación Bahiense y en varios provinciales. Luego pasó por Independiente de Neuquén, Argentino de Junín y Asociación Italiana, en el TNA; y Estudiantes en la Liga Nacional 2008/´09.En la Comarca jugó en Sol de Mayo (2005 y 2008) y en San Martín (2007). En la última campaña de los “albicelestes” fue parte de un desembarco masivo de jugadores provenientes de Italiana de Charata: Con él jugó Sebastián Rodríguez y en Atenas ficharon Hernán Etchepare y Nicolás Bessone. De su hermano dijo que “es un gran jugador, con una gran capacidad para jugar uno contra uno en el poste bajo, tiene buen tiro de media distancia y es muy intenso para pelear los rebotes en ambos tableros. Hasta hace poco se llenaba de foules muy rápido y es algo que corrigió”. Según Lucas “Mauro es un excelente tipo, con un gran corazón y muy buenos valores”.
La última vez que compartieron equipo fue el año pasado en la Selección de Punta Alta que se eliminó frente al combinado de Bahía Blanca en el marco del torneo Provincial de mayores. Sólo estuvieron juntos en el primer partido disputado en Bahía, porque la fecha del segundo se superponía con un encuentro entre Jorge Newbery y San Martín por la competencia local.
